EDUCO NICARAGUA SOSTIENE QUE LA EDUCACIÓN ES FUNDAMENTAL PARA ALCANZAR LA INCLUSIÓN Y EL EMPODERAMIENTO DE LAS NIÑAS
Más de 8 mil niñas, adolescentes y jóvenes de 107 centros educativos participan en proyectos impulsados por Educo junto a las comunidades educativas en Managua, Ciudad Sandino, Estelí, Jinotega, Matagalpa y San Rafael del Norte.
Managua 8 de marzo del 2018. Con motivo del Día Internacional de la Mujer, Educo reafirma su compromiso con la educación, medio fundamental para alcanzar la inclusión y el empoderamiento de las niñas en Nicaragua. Dalia Montenegro, responsable de Educación en Educo Nicaragua, asegura que la educación es un derecho habilitante que garantiza el cumplimiento de los demás derechos, …”entre más preparadas estén las niñas en el ámbito educativo, potenciarán sus habilidades y tendrán mayores herramientas para hacer transformaciones en su entorno, favorables para el desarrollo del país”.
Según el Banco Central de Nicaragua (BCN), el 50.8% de la población son mujeres, es decir un poco más de 3.2 millones. De ellas, 1.7 millones tienen entre 10 y 39 años. Es por ello por lo que sostenemos que trabajar la inclusión educativa es potenciar todas las habilidades de la mujer y en este sentido comienza desde la niñez para asegurar el empoderamiento en todos los ámbitos social, político y económico.
En los últimos años, Nicaragua ha venido incrementando el acceso a la educación en las niñas, esfuerzo que se ha confirmado en el Programa Nacional de Desarrollo Humano 2018-2021 con la ratificación de su compromiso por la ampliación de la cobertura escolar con equidad y la promoción desde la educación en las consejerías educativas de la eliminación de todas las formas de violencia contra la mujer, las prácticas abusivas, la discriminación familiar, laboral y social.
Lo mencionado anteriormente confirma lo que muchos estudios en América Latina han destacado, acerca de que las mujeres tienen mayor acceso a la educación que los varones, tendencia que contribuye a que la calidad educativa sea cada vez más equitativa. Sin embargo, sabemos que todavía existen muchos desafíos que limitan el acceso a la educación y que debemos asumir como parte de la responsabilidad compartida desde la familia y la comunidad. Es necesario trabajar en una cultura de igualdad, protección y buen trato para que los patrones de crianza, las relaciones de poder y los estereotipos no sigan negando el acceso y permanencia de las niñas en la educación.
Montenegro, sostiene que “las niñas cuando acceden a la escuela permanecen y aprovechan más la educación, lo que significa una oportunidad para trabajar el empoderamiento desde la educación. Una niña que tiene la oportunidad de llegar a la educación secundaria y universitaria va a tener más información para acceder a mejores oportunidades de empleos e influir en la comunidad, municipio o el país para hacer cambios positivos en las relaciones sociales y económicas”.
Según explica la experta en educación, “Educar a una niña, es educar para el futuro, la mujer en nuestro país es el pilar fundamental en la familia y son ellas quienes principalmente forman a las niñas y niños, una madre preparada, va a tener a hijas e hijos mejor preparados”. Estudios intergeneracionales afirman que el nivel educativo de la madre tiene gran influencia sobre la escolaridad de sus hijos. A medida que el nivel de educación de la madre es elevado, aumenta la probabilidad de que las niñas y niños no repitan el grado.
Desde Educo promovemos el protagonismo real de las niñas, mediante procesos de empoderamiento que les permitan conocer y vivenciar sus derechos en la escuela, la familia y la comunidad. En el portafolio de proyectos que Educo ejecuta junto a sus socios, el 55% de participantes son niñas, es decir más de 8 mil chavalas se encuentran participando en espacios para la promoción del derecho a la educación, prevención de la violencia, educación inicial y liderazgo, entre otros.